sábado, 28 de mayo de 2011
cuando cuentas a los leones
Leo a Carver mientras me aproximo a un precipicio demasiado alto, demasiado rocoso. Edifico imposibles en páramos yermos. Burroughs flota cuando sueño con ovejas. Tolstói me mira con desdén. Ibsen censura lo que escribo, mientras que Bukowski me tiende una botella de ginebra. La cojo sonriendo pensando que Carver sigue ahí. Carver. Carver. Catedral. La TV sigue sonando, la radio encuentra interferencias cuando toso. Las redes sociales me siguen pareciendo una mierda. Los desalojos de las ideas mucho más. El mundo está sostenido con débiles sonrisas, que forman una carcajada.
Kundera me da qué pensar. Y Miller... él es otra historia. Roja, cálida, y de habitación pequeña. CARVER.
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Algún día los grandes escritores se revelarán con ira y fuego en contra de la dictadura de las redes sociales.
ResponderEliminarMe encanta tu lunar en el labio*
ResponderEliminarestás preciosa en esa foto :)
ResponderEliminarme encanta!
guapisima
ResponderEliminarOH SI
ResponderEliminarhay cosas peores que
estar solo
pero a menudo toma décadas
darse cuenta de ello
y más a menudo
cuando esto ocurre
es demasiado tarde
y no hay nada peor
que
un demasiado tarde
Un beso bombom